El POST de la SEMANA.

– Pedro Luis Quevedo Bravo –
Atleta y Directivo del A.C. MANCHATHON.

«MARATHON. ¿Por qué me gusta la Marathon ….?»
Como dice Joaquín Sabina en su copla «…más de mil razones, más de mil motivos, para no cortarme de un tajo las venas …»

Yo quizá no llego a esa cifra, pero ahí van algunas razones por las que me gusta la MARATHON.
– Por los primeros 42 kilómetros y por los 195 metros restantes (sobre todo por éstos).
– Por ser la meta de todos los osados que alguna vez fuimos capaces de correr diez o quince kilómetros seguidos.
– Por las doce semanas de entrenamiento específico de Fran, cumplido metódica y escrupulosamente, día a día, junto a mi colega de fatigas José Ángel y a Trufa.
– Por los rodajes, los rodajes largos y los rodajes muuuuuy largos.
– Por los martes de series cortas.
– Por los jueves de series largas.
– Por la mañana siguiente a las series y rodajes, anotando en mi hoja de entrenamiento (siempre a mano y con boli) cómo me han salido (busque, compare y ….).
– Por la escarcha en el gorro de lana y en la espalda, incluso por los días de entreno con lluvia.
– Por las sabias lecciones habladas de Fran y por las lecciones calladas de Cipri.
– Por los rodajes «suaves para definir» de la mañana del sábado con Miguel Tomás ( al final nunca menos de 18 kms ).
– Por ver la cara de José Ángel cuando me pongo las zapatillas de tigre
– Por las batallitas en los rodajes junto a Vicente ( los entrañables y salvajes años ochenta, la filosofía de vida y las paradas para visitar el WC ).
– Por el miedo a los días fríos, sobre todo en los rodajes con Carlos López ( ya me comprenderéis cuando tengamos oportunidad de hacer un rodaje largo con él en pleno mes de enero ) en los que termino viendo la espalda de Luis a lo lejos.
– Por Madrid ‘2006, mi primer marathon, preparado codo a codo, durante tres meses, junto a mi amigo del alma José Antonio.
– Por el puñetero test de la semana de antes.
– Por los nervios de los días anteriores a la carrera ( ¿ por qué no me la podré quitar de la cabeza ? ).
– Por el viaje, el hotel, la feria del corredor, la comida de la pasta, la visita a la ciudad todos los manchathones juntos. ( Eso si, debidamente equipados para la ocasión, chándal, chubasquero, camiseta…….. y demás ).
– Por el rodaje de la tarde de antes por Roma, a ritmo de récord del mundo, entre millones de turistas, tras Fran y Miguel Tomás.
– Por el diluvio universal del sábado en Sevilla.
– Por no ser capaces, diez personas adultas, mayores de edad, con estudios ??, de sacar un billete y entrar al metro de Valencia.
– Por el insomnio de la noche de antes y el desayuno a las seis de la mañana.
– Por el abrazo y sincero deseo de suerte para todos los compañeros en la línea de meta.
– Por la última meada en cuclillas en la línea de salida.
– Por la inmensa satisfacción de terminar.
– Por la inmensa satisfacción de terminar bien, entero y con marca personal.
– Por la inmensa satisfacción de terminar mal, roto y con un marca mediocre, tirando a muy mala.
– Por la medalla.
– Por la comida tras la prueba, con moviola incluida.
– Por la reconfortante siesta en el coche durante el camino de vuelta ( ¿ verdad Loren ? ).
– Por las agujetas de los días posteriores ( «Dios mío como podrán salir hasta en las orejas ….. » ).

Y sobre todo por compartir con amigos todos estos momentos, imposibles de saborear en otras carreras.

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